LAMENTABLE...

Simplemente cabe una sola palabra: LAMENTABLE. En la noche de hoy, mientras se desarrollaba con normalidad la segunda final del Eduardo Martínez Monegal en Primera División, nuestro compañero Fernando Bonilla, que oficiaba de segundo árbitro asistente, fue cobardemente agredido con un elemento pirotécnico en la mano izquierda por un ANORMAL que lo único que hace es enchastrar lo que era una fiesta deportiva. Desde aquí nuestro saludo al compañero, y esperemos que aquellos que tienen que ser responsables para que hechos de esta naturaleza no sucedan más, actúen de acuerdo a las circunstancias. Elementos negativos del fútbol deben ser erradicados desde muy temprano, porque el único que pierde acá con todo esto es el FÚTBOL.

Para tranquilidad de los demás compañeros, informamos que Fernando sufrió una quemadura de segundo grado en su mano izquierda, que si bien es una lesión de importancia, la misma no reviste gravedad.